Temperamento amigable: Los Schnauzers son perros inteligentes, enérgicos y juguetones, lo que los hace ideales para familias, incluidos niños pequeños. Son tranquilos y fáciles de adiestrar en obediencia, lo que facilita el entrenamiento básico desde una edad temprana.

Adaptabilidad: Estos perros son muy adaptables y pueden ser felices tanto en un entorno urbano como rural, lo que los convierte en una excelente opción para hogares con diferentes estilos de vida.

Compañía y protección: A pesar de su tamaño pequeño, los Schnauzers son buenos perros de guardia, alertando a los dueños sobre cualquier extraño. También son cariñosos y disfrutan de la compañía de sus dueños, proporcionando una excelente compañía.

Fácil mantenimiento: Aunque tienen un manto duro que necesita ser cepillado, no son muy propensos a perder pelo, lo cual es beneficioso para personas con alergias o que desean un hogar más limpio.